CÓMO TRATAR CON
PERSONAS DIFÍCILES
Guía
Práctica Basada en las Investigaciones de Ursula Marka
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FIGURAS AUTORITARIAS AGRESIVAS
Nadie tiene derecho a ser
agresivo con otra persona (salvo cuando se enfrenta a una agresión
física, en cuyo caso puede resultar necesario). La conducta agresiva,
especialmente cuando se trata de alguien que ya se encuentra en una
posición de autoridad, suele ser una forma de dominar a los demás, no
de guiarles. El agresor quiere que todos hagan su voluntad, aunque
obtendría mejores resultados si pidiera las cosas.
Si tiene que enfrentarse a
una figura de autoridad, lo cual siempre es difícil, tenga presente
que todos somos humanos y que todos nos equivocamos. Intente no
precipitarse a sacar conclusiones negativas si esa conducta solo se
produce esporádicamente. Solo cuando se convierte en una norma,
supone un problema, y es necesario darle un tratamiento utilizando
algunas de las técnicas asertivas citadas.
¿SE
VE OBLIGADO A SEGUIR
«ESTANDO
EN SU LUGAR»?
Puede que usted haya sido
una niña sobreprotegida, que la traten como a una «frágil esposa» o
que al guíen obstaculice su progreso en el trabajo. Estos dos últimos
casos se suelen dar cuando alguien quiere ser más importante que
usted; para conseguirlo ha de ponerle en un segundo plano, creyendo
que de este modo ensalza su propia posición. Sea cual fuera la razón,
el resultado es que su desarrollo personal se ve limitado y que crece
el resentimiento hacia la persona responsable de ello.
En tal caso, lo único que
puede hacer es ser asertivo. Es necesario sacar a relucir el asunto y
hablar del problema con la figura de autoridad que la está
reprimiendo. Como es natural, tendrá que elegir el momento adecuado.
No tiene sentido abordar el asunto cuando la otra persona está de mal
humor, porque no conseguiría nada. También es una buena idea ensayar
con antelación lo que va a decir, especialmente si no está
acostumbrado a expresar lo que siente. Su guión ha de cubrir los
siguientes puntos:
. La situación
actual.
. Cómo se siente.
. Lo que le gustaría que cambiara.
. Cuál ha de ser el
resultado.
El siguiente podría ser un
ejemplo de este plan de cuatro puntos:
«Cada vez que intento
arreglar un enchufe de algún electrodoméstico me sacas el
destornillador de las manos y haces tú el trabajo.» [Situación
actual.]
«Esto hace que me sienta
mal y me da la impresión de que me consideras incompetente, lo cual me
duele bastante.» [Cómo se siente]
«Te ruego que me dejes
hacer sola el trabajo.» [El cambio que le gustaría.]
«De ese modo te
ahorrarás la molestia y tendrás más tiempo para hacer otras cosas.»
[El resultado.]
¿NUNCA RECIBE RECONOCIMIENTO POR LO QUE HACE?
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